S.A. Thompson – 8/06/2025

---

Resumen:

• La Red de Permacultura de Málaga es un campo cultural. 
• El marco de la Red se puede dividir entre agentes y medios.  
• Los agentes se categorizan por los lenguajes que codifican sus competencias.
• Los medios son sistemas dinámicos que se clasifican por ambientes y por los flujos de energía o material que sostienen.  
• El alcance de la Red dentro de este marco depende de las competencias de sus agentes y la aplicabilidad de las competencias al medio. 
• La escala de la Red es relativa a los alcances y los ámbitos.

Estás preguntas se refieren al alcance y al marco de nuestro diseño en red como permacultorxs en Málaga. En este artículo quiero explorar estos límites posibles al marco del alcance. Para llevar a cabo ese proceso primero definimos la Red. Con esa definición voy a nombrar algunas categorías de dimensiones que abarcan nuestras actividades, proponerles métricas y códigos para ayudarnos a establecer la escala o escalas en las que operamos. Este análisis lo ofrezco con el objetivo de acercarnos a un proceso de diseño colectivo entre l@s agentes de permacultura en Málaga

La Red de Permacultorxs de Málaga es, simplemente, muchas cosas para muchas personas. Operativamente, en la actualidad se compone de una asamblea abierta, un ciclo de encuentros estacionales, cuatro subgrupos de trabajo, un canal en Telegram e Instagram, una web y la sinergia emergente entre unas docenas de proyectos y entidades fiscales, además de cientos de individuos interconectados libremente. La sinergia entre los proyectos y las entidades fiscales ha engendrado varias iniciativas productivas que permean otros sectores de la región. Entre los grupos de trabajo destaca una labor de canalizar esa sinergia hacia lo urbano y la acción social. Los otros grupos de trabajo son de organización estructural: Comunicación, DiGestión, y Encuentropedia.

En efecto, la Red es más que sus agentes (a lo largo de este texto voy a usar el término agente para referirme a cualquier ente con capacidad de afectar la realidad: personas, proyectos, entidades fiscales, comunidades, instituciones, etc). La Red no tiene estatus oficial, por lo cual no tiene membresía, ni gobierno. Los agentes se asocian libremente y se práctica una cultura de cuidados en los encuentros, eventos y redes sociales.

Hay quienes dicen que la Red es mingas y fuego visión. Otros ven la magia del arte en la transmisión de los valores y los conocimientos. Otras quieren cubrir necesidades de alimentación. Otros ven la posibilidad de nutrir una cultura de cuidados. Otras reconocen la potencia revolucionaria que traen las soluciones de la permacultura. Otros quieren compartir sus experiencias vitales. Otros quieren enredarse y crear iniciativas para acompañar nuestra cultura global a integrarnos nuevamente y de forma beneficiosa en la biosfera.

Integrar en lugar de segregar… Por la diversidad de filosofías y formas de concebir la permacultura, nuestra definición de la Red ha de ser lo más inclusiva posible.

Atención, voy a hacer un salto conceptual para ahorrar mucho texto, y me encantaría hablar más extensamente sobre lo que voy a decir ahora: Vemos que la Red existe en un plano cultural.  La agencia humana e institucional engendra acción que incide sobre el medio, modificándolo.  Es la agencia que afecta al mundo material.  El escenario donde interactúan los agentes en términos generales se puede llamar cultura.  Por eso creo que la definición más sencilla es que la Red es un campo cultural. Más específicamente, es una burbuja cultural asociada con una auto estructuración espontánea e intencionada dentro del campo cultural general malagueño.

Partir de esta conceptualización nos facilita el proceso de búsqueda de un marco. Por cultura me refiero a todo aquello que abarca la actividad humana, esa esfera de nexo común entre lo social, lo académico, lo artístico, lo administrativo, lo espiritual, etc.  Planteo aquí que el marco de la Red es la misma cultura y sus aristas.  Parece un poco vago, perdón. Es como no decir nada. Si has aguantado hasta ahora, permíteme desempaquetarlo un poco más…

Afirmamos que el idioma es un código común que usamos todas las personas. Nosotros, y la cultura, expresamos ideas entre nosotros usando el lenguaje.  Luego, el lenguaje se especializa. Cada rama de la cultura tiene un subconjunto de códigos que pertenece a su especialización. Cada maestrillo tiene su librillo. Estas variantes al lenguaje común, estos conjuntos de códigos son algunas de las aristas del marco. Esto nos facilita el trabajo porque vienen ya con sus propias métricas.

Si la cultura general engloba todos estos códigos entonces nuestra burbuja cultural engloba los códigos que representan las competencias de los agentes de la Red. Cuantas más competencias representamos, más alcance tiene el marco.

Pongo un ejemplo: Hay una permacultora que se dedica al diseño, ha logrado cierta habilidad en la implementación y hay demanda por sus servicios – su código es la gestión (por ejemplo: administración, contabilidad, planificación, etc).  En un encuentro de la Red ella conversa con un señor mayor, sindicalista. El señor muestra la profunda comprensión que tiene sobre los códigos del activismo. En la amablea terminan trabajando juntos en un grupo de trabajo del proceso de diseño de la Red y nace, de la sinergia de su encuentro, la iniciativa ecologista más efectiva en la historia de Málaga.

El diseño de la red, a propósito, no va a ser algo concreto como el diseño de una finca o la planificación de un proyecto. Por esencia es algo mucho más sofisticado. Quizás termina siendo un código fácil de usar, asi para orientarnos colectivamente.

Esta es la deriva que me ocupa.

Estos códigos se pueden categorizar. Por un lado, se pueden agrupar por naturaleza o etimología común. Por ejemplo, hay una ecología omnipresente entre la economía, la administración legal y los cuerpos armados; dado que todo eso se expresa con dinero, tiempo y peso.  Hay un vocabulario específico a los temas relacionados con la espiritualidad.  Las varias ramas de la ciencia resumen sus postulados en los símbolos de la física y la matemática.  El Arte por otro lado ES como la cultura habla consigo misma.  Paralelamente, están los códigos que se comunican sin lenguaje. Vemos que hay códigos gráficos (que provienen del lenguaje oral y escrito), y códigos no gráficos (corporales, estructurales, sociales, etc.).  Estos anteriores son también otras aristas del marco, son más difíciles de parametrizar y requieren convenciones específicas para hacer visible lo invisible.

Por otro lado, para terminar de categorizar las aristas, tenemos que considerar lo que estos conjuntos simbólicos están intentando comunicar.  Cada código representa una forma de mapear el mundo, de simplificar el mundo manifiesto, para poder manipular algún fenómeno particular.  Están asociados con la interpretación y manipulación del plano físico.  Los códigos enfocan y refuerzan la agencia humana.  Es el otro lado del Tao, el uso del lenguaje y los códigos engendra acción. La acción se realiza sobre algo. Ese algo es absolutamente todo lo tangible; la biósfera, la comunidad, el gobierno, el futuro.   Esto es un principio del Marco. El alcance se refiere a ambos; los agentes (o la agencia) que se parametrizan por los códigos de sus competencias, y los medios que se clasifican por ambientes y se caracterizan por flujos (adelanto).

El medio en algunos casos puede ser geográfico, al nivel biológico se trata de la diversidad ecológica, el medio también está compuesto por toda la infraestructura, física e informática. También se trata de los medios más abstractos, escenas artísticas, movimientos sociales, ayuntamientos; e incluso, el medio pueden ser los mismos códigos.  Lejos de ser estáticos – los medios, a su vez, están compuestos, en muchos casos, también de agentes – humanos y no humanos.  Se caracterizan como sistemas dinámicos con flujos de energía o materiales interconectados en metabolismos de transformadores acoplados.  Todos los sistemas dinámicos perciben erosión, que indica flujo y a ellos se puede aplicar las estrategias principales de manejo de agua; ralentizar, extender, infiltrar, captar, almacenar, y generar sistemas de información alrededor del flujo.

La definición operacional de la red y la síntesis de su actividad nos indica que la Red opera en una escala total más amplia que la de sus agentes, y le da acceso a otros niveles, y a otras dimensiones de intervención. Y esa escala se amplía con las competencias de los agentes integrantes.   La escala también puede aplicarse a cada una de esas dimensiones de la cultura.  En esos casos, la escala es relativa al código.  Por ejemplo, en la administración las escalas son; vecinal, municipal, provincial, región autónoma, estatal, etc.

Con estos principios podemos construir un mapa base para simplificar de forma gráfica las aristas de nuestro proyecto común. Y teniendo una síntesis de las escalas relativas en que nos vemos activos y donde queremos activarnos, podemos idear un proceso de diseño colectivo, sobre una imagen de la realidad con toda su complejidad reducida a términos comprensibles.  Desde ese proceso saldrán las diversas formas y estrategias para atender las varias aristas.  Y con eso podemos celebrar el logro de haber diseñado juntxs una Red plural y libre.  No es un proceso fácil, pero el éxito, solo viene desde el análisis y la planificación.   Tampoco hace falta reinventar la rueda, solo enmarcar la cultura que ya existe, y siguiera existiendo, para poder estimular un metabolismo expansivo, y ético, con capacidad de afectar de forma relevante la cultura general.

 Considerando la aplicabilidad universal de la permacultura, nosotras como 3ra generación de permacultoras, nos podemos sentir confiadas en el deber de co-crear organizaciones en línea con la ética de la permacultura. El objetivo puede ser el que tantas veces hemos nombrado: ampliar el alcance de la Permacultura y permear profundamente en la cultura general.  Además de determinar esas bases nutritivas culturales, debemos de compartir con la sociedad una historia diferente sobre el futuro. Una que hable de la integración en la Biosfera y la expansión de la cultura de cuidados.